La doctora en Letras oriunda de Cuba, Katia Viera, es una de las investigadoras seleccionadas por el Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET) como beneficiaria dentro del marco de la Convocatoria de Becas Internas Postdoctorales para temas generales 2022, con lugar de trabajo radicado en el Centro de Investigación y Transferencia (CIT) Villa María del Instituto Académico Pedagógico de Ciencias Humanas (IAPCH) de la Universidad Nacional de Villa María (UNVM).
Tuvimos la oportunidad de dialogar con ella y nos contó acerca del proyecto en el que trabaja actualmente.
Nacida en La Habana, Katia estudió la Licenciatura en Letras en la Universidad de La Habana y se desempeñó como profesora de Literatura en la misma desde el 2012. En 2016 le fue otorgada una beca doctoral por el CONICET para realizar el Doctorado en Letras en la Universidad Nacional de Córdoba y desde ese momento se desempeña como profesora adscripta de diversas cátedras.
En cuanto a su proyecto de la beca posdoctoral dijo que está muy relacionado con algunas preocupaciones que fueron surgiendo en su investigación doctoral, ya que mientras avanzaba en la búsqueda de materiales teórico-críticos pensados desde América Latina y Estados Unidos sobre literatura cubana reciente, comenzó a notar que en la crítica producida tanto en Cuba como en el exterior se hacían cada vez más sistemáticas algunas nociones teórico-metafóricas para explicarla. Del mismo modo, observó que esa crítica incidía a veces en un ‘’determinismo localista y presentista’’, y ponía en circulación conceptos que “parecen depositarios de unas economías deseantes más atentas a la espectacularización de ‘lo cubano’ para el nuevo contexto internacional, que al seguimiento de ciertas lógicas representacionales de la historia cultural, intelectual y artística de Cuba’’.
En la misma línea, la becaria expresó: “Me propuse para la instancia de investigación posdoctoral ofrecer un conocimiento que devenga de la relación entre la crítica sobre literatura cubana actual y la creación literaria cubana que emerge alrededor del año 2010. Realizar un estudio de este tipo, que observa los diálogos entre la crítica y la producción literaria, permitiría no solo expandir el aparato crítico sino también “desalojar” lecturas ya instaladas en la crítica producida tanto en Cuba como en el exterior”. Además añadió que su proyecto aspira a abrir preguntas en el marco no solo de las escrituras críticas y literarias cubanas recientes, sino de las latinoamericanas y caribeñas del presente.
Respecto al proceso de su investigación dijo que estará sustentado en distintas actividades. ‘’En un primer momento estaré diseñando junto a mis directores de investigación, algunas pautas de observación de los textos. Preveo un periodo de lectura crítica y fichaje del material bibliográfico que me permita avanzar en la hipótesis de trabajo. Asimismo, proyecto un periodo de estudio de las perspectivas conceptuales, de análisis del corpus, de desarrollo de nuevas hipótesis parciales y de sistematización de resultados. Será transversal a todo ello la participación en congresos y actividades científicas.’’, detalló la experta.
Acerca de sus sensaciones en base al reciente otorgamiento de la beca posdoctoral, Katia comentó que implica mucho para ella y que extiende su agradecimiento hacia aquella beca doctoral que el CONICET le otorgó en 2016 y sin la cual no hubiera podido viajar a Argentina e insertar muchas de las preocupaciones académicas en su propia vida.
De Igual manera, remarcó que el hecho de poder investigar en la Universidad Nacional de Villa María aporta nuevos sentidos y nuevos modos de compartir conocimiento con otros. ‘’La experiencia, luego de mi labor como profesora suplente en esta universidad, ha sido maravillosa. La UNVM me dio la oportunidad de conocer estudiantes, profesores-investigadores, no-docentes y compartir con ellos otras maneras de convivir, hacia el fortalecimiento de ese lazo afectivo y académico. En otras oportunidades he dicho que le debo mucho a la educación pública y gratuita latinoamericana, creo que este es otro momento para poder entregar algo de lo mucho que me ha sido dado en estos años’’, aseguró la investigadora.
Ante el panorama de la investigación en nuestro país, la entrevistada concluyó: ‘’Observo en Argentina la creación de una política científica que contribuye a formar recursos humanos cada vez más calificados y exigentes con el conocimiento. El sistema de becas doctorales y posdoctorales potencia esa labor en un gesto también por incorporar al entorno investigativo preocupaciones venidas de distintos frentes teóricos, metodológicos y contextuales’’.